l abordaje clásico a los gliomas considera la extirpación del tumor localizado dentro de un cerebro con una organización funcional fija, que viene definida a su vez por unos límites anatómicos precisos (el surco central, el área de “Broca”, el área de “Wernicke”). Pero la frecuente localización de los gliomas en el interior de áreas elocuentes, y su importante capacidad de infiltrar el tejido cerebral, hace necesario introducir nuevos conceptos en el manejo de estos tumores. Primero, la variabilidad inter-individual anatomo-funcional en la localización de áreas elocuentes, lo que explica la necesidad de realizar una cartografía funcional, para así localizar las regiones elocuentes en un paciente concreto. Segundo la conectividad cerebral, los gliomas tienen tendencia a extenderse a lo largo de las vías de sustancia blanca, por eso tendremos que identificar los fascículos y tractos que marcarán los límites funcionales subcorticales con el tumor. Tercero la plasticidad cerebral, o capacidad de reorganización de la función hacia otras áreas cerebrales, lo que permite extirpar regiones del tumor que infiltran áreas a priori de “alta elocuencia”.
Gracias a la incorporación de estos nuevos conceptos a las diferentes disciplinas implicadas en el manejo de los gliomas (diagnóstico por imagen, tratamiento quirúrgico, quimioterapia, radioterapia, etc.), hemos asistido en la última década a un cambio radical en el abordaje a estos tumores. Diferentes técnicas de imagen funcional (resonancia magnética funcional, tomografía por emisión de positrones, magnetoencefalografía, etc.), nos permiten estudiar la organización funcional cortical de cada paciente. La tractografía por tensor de difusión nos ayuda a entender la conectividad cerebral en un paciente concreto, definiendo las relaciones tridimensionales que existen entre cada fascículo y el tumor. La estimulación eléctrica intraoperatoria se ha convertido en la actualidad en el “Gold Standard” para la localización de regiones cerebrales elocuentes, porque permite identificar de forma precisa y reproductible los límites funcionales corticales y subcorticales, en cada momento de la resección tumoral. Pero además, estos nuevos conceptos se aplican a los tratamientos complementarios a la cirugía, lo que nos hace plantearnos nuevas cuestiones: si en la cirugía hemos llevado la resección tumoral hasta los límites con la función, ¿cuál es la mejor pauta de radioterapia que no lesione estas áreas elocuentes localizadas en las paredes de la cavidad de resección?, o bien ¿es posible convertir un tumor “irresecable” debido a la infiltración de áreas elocuentes en un tumor “resecable”, mediante la administración de una pauta de quimioterapia?
En el presente congreso queremos analizar estas y otras cuestiones, con la intención de dar una perspectiva diferente en el manejo de los gliomas. Este nuevo abordaje considera, al igual que el abordaje clásico, la necesidad de destruir el tejido tumoral, pero además pone el énfasis en identificar y preservar el tejido funcional que rodea al tumor. De esta manera se consigue: incrementar las indicaciones terapéuticas en gliomas en áreas elocuentes, maximizar la resección del tumor en la cirugía, aumentar el impacto neuro-oncológico de los tratamientos complementarios y minimizar las secuelas neurológicas, con preservación de la calidad de vida de los pacientes.
Esperamos que el programa que proponemos sea de interés para todos los profesionales implicados en el manejo de estos enfermos y poder contar con su presencia.
El congreso tendrá lugar en el prestigioso Palacio de la Magdalena, situado en el barrio El Sardinero, en pleno corazón de la ciudad de Santander.
Secretaría científica